A propósito del informe Breaking the Spiral of Uninsurable Climate Losses de Finance Watch (octubre 2025)
El nuevo informe de Finance Watch, titulado Breaking the Spiral of Uninsurable Climate Losses, lanza una advertencia clara: el sistema asegurador europeo se enfrenta a una creciente “espiral de inasegurabilidad”. A medida que los desastres naturales relacionados con el cambio climático aumentan en frecuencia e intensidad, las pérdidas económicas se disparan, las primas suben, la cobertura se reduce y más daños quedan sin asegurar.
El resultado es una brecha de protección cada vez mayor que amenaza no solo a hogares y empresas, sino también a la estabilidad fiscal y financiera de Europa. Hoy, apenas el 25 % de las pérdidas por catástrofes naturales están cubiertas por seguros, y en algunos países de la UE esa cifra cae al 5 %.
Finance Watch sostiene que no basta con ampliar la cobertura: hay que actuar sobre la raíz del problema, invirtiendo en mitigación y adaptación climática para reducir el riesgo de origen.
Principales hallazgos del informe
Una brecha que puede convertirse en vacío
Los daños no asegurados aumentan rápidamente, comprometiendo la solvencia de los sistemas públicos y privados. Sin medidas preventivas, muchas zonas podrían volverse literalmente “inasegurables”.
Soluciones actuales: necesarias, pero insuficientes
Existen esquemas nacionales (como el CCR en Francia o el Consorcio de Compensación de Seguros en España), y el BCE y EIOPA proponen un modelo europeo de dos pilares:
1️⃣ Un esquema público-privado de reaseguro europeo.
2️⃣ Un fondo europeo de desastres para activos públicos.
Finance Watch respalda este enfoque, pero advierte que solo funcionará si se añade un tercer pilar: cerrar la brecha de inversión climática.
El “tercer pilar”: inversión para la resiliencia
Sin inversión suficiente en mitigación y adaptación, cualquier esquema de seguros solo redistribuirá pérdidas crecientes.
El informe estima que cerrar la brecha de inversión climática —valorada en billones de euros— es esencial para evitar un colapso del sistema asegurador europeo.
El sector financiero tiene un papel clave, pero limitado: los mercados de capital privados podrían cubrir solo un tercio de las necesidades anuales de inversión. El resto debe provenir de financiación pública o público-privada, orientada con criterios de impacto y direccionalidad, para asegurar que el capital fluya hacia sectores con verdadero valor de transición.
Recomendaciones políticas
- Aplicar el modelo de dos pilares del BCE y EIOPA con condicionalidad:
- Reaseguro europeo y fondo de desastres.
- Planes de transición climática creíbles para aseguradoras y gobiernos.
- Crear un tercer pilar de inversión climática, mediante:
- Nuevas herramientas público-privadas de financiación.
- Incentivos regulatorios (Basel, Solvencia II) que premien inversiones a largo plazo.
- Criterios de impacto y dirección en la inversión concesional.
- Fomentar la visión de largo plazo, incorporando los beneficios de la acción temprana frente a los costes de la inacción.
Conclusión
Europa está atrapada entre dos brechas: la de protección y la de inversión. Si no se cierra la segunda, la primera se convertirá en un abismo financiero.
Finance Watch concluye que la inversión climática no debe verse como gasto, sino como una política de estabilidad financiera. El futuro de la asegurabilidad —y de la resiliencia económica europea— depende de cómo se financie la transición climática hoy.
Más información: Finance Watch – Breaking the Spiral of Uninsurable Climate Losses

