Una entrevista con Saskia Sassen sobre el suelo urbano y la vivienda antes de la conferencia anual de Housing Europe
Michalis Goudis, New York 28/05/2019
Se describe a sí misma como “una estudiante de las ciudades, la inmigración y los estados en la economía mundial, con la desigualdad, el género y la digitalización, tres variables clave en su trabajo”. De hecho, gracias a su pasión y dedicación al estudio de lo anterior, nos ha ayudado a comprender mejor la realidad moderna. La próxima semana subirá al escenario para pronunciar el discurso de apertura en la conferencia anual de Housing Europe ‘This land is whose land’ que se celebra en el marco del II Festival Internacional de Vivienda Social en Lyon. En esta entrevista flash, pocos días antes de tomar el avión desde Nueva York, Saskia Sassen, catedrática de Sociología de la Universidad de Columbia, nos hace reflexionar: “¿Quién es el dueño de nuestras ciudades?
Los ciudadanos de muchas de las principales ciudades europeas salen a las calles a manifestarse, ya que se sienten masivamente excluidos de múltiples maneras de los lugares en los que viven. Uno de sus últimos libros ‘Expulsiones’ explica en profundidad las causas de fondo. ¿Podría darnos una breve explicación de lo que impulsan estos movimientos en Europa?
La vivienda se ha convertido en un problema importante en un número cada vez mayor de ciudades de todo el mundo. No puedo resistirme a citar a Marx y Engels que nos dieron el concepto de la “cuestión de la vivienda”. Pero es importante reconocer que hoy en día nos enfrentamos, cada vez en más casos, a un tema muy diferente al planteado por Marx & Engels. En ese período anterior, y en muchos sentidos aún hoy en día, los que hacían difícil que las personas con ingresos modestos, y los pobres en general, obtuvieran una vivienda, eran en su mayoría (¡no sólo!) pequeños operadores. Hicieron un poco de dinero aquí y allá engañando en el precio real de la unidad, amenazando regularmente a la gente que había alquilado la unidad, y así sucesivamente.
Hoy nos enfrentamos a un escenario muy diferente. Propiedades que hasta hace unos años no habrían sido de interés para las grandes (¡y me refiero a las grandes!) empresas financieras, ahora son de gran interés. Y no se trata de la vivienda per se; así no es como la ven las grandes empresas financieras. Creo que los ciudadanos de la ciudad deberían ser conscientes de que, cada vez más, tratarán con grandes empresas si quieren alquilar o comprar un piso en un gran edificio residencial.
Las pruebas están bastante, aunque no totalmente, disponibles. El caso más famoso es Blackwell, una importante empresa financiera que ha comprado cientos de grandes complejos de viviendas en varios países sólo en los últimos años.
La razón: no se trata de la vivienda per se, se trata de acceder a los activos -y a través de la masa algorítmica se puede transformar un inodoro, una habitación en un activo (abstracto)- algo material que apoya o respalda a un instrumento financiero.
Lecturas adicionales: ” Saskia Sassen ‘Who owns our Cities’ on The Guardian” .”A monster crawls into the city’, an urban fairytale by Saskia Sassen on the Guardian”. “Sassen, Saskia (2014). Expulsions: Brutality and Complexity in the Global Economy. Cambridge, MA: Harvard University “.
La ordenación del territorio y las políticas de ordenación del territorio parecen ser hoy en día instrumentos insuficientes para garantizar el derecho de todos a la ciudad. ¿Dónde se puede empezar a detener la “adquisición de terrenos urbanos” sobre el que has estado escribiendo?
,Buena pregunta. No es fácil de responder! Pero un primer paso es hacernos conscientes de que, cada vez más, la vivienda en grandes edificios ya no se trata simplemente del piso que se alquila o se compra. Si los residentes de los grandes edificios de las grandes ciudades pueden ponerse de acuerdo y luchar por sus derechos, podríamos iniciar un movimiento. La clave aquí es que todos los residentes entiendan lo que está en juego… Una forma de decirlo es que la “cuestión de la vivienda” ya no se trata simplemente de la vivienda. Hay poderosos actores involucrados que han decidido – supongo que hace unos años – que su necesidad de activos, cosas reales, también pueden trabajar con casas, no importa cuán modestas sean, siempre y cuando formen parte de un gran complejo habitacional. Entonces pueden transformar estos complejos de viviendas que podemos ver con nuestros ojos, en un conjunto de activos que no podemos ver con nuestros ojos -sólo vemos el edificio- y que el sistema financiero puede vender a los inversores como “valores respaldados por activos”, un instrumento familiar y ahora muy deseable entre los inversores financieros de alto nivel.
Lecturas adicionales:Sassen S. (2017) Predatory Formations Dressed in Wall Street Suits and Algorithmic Math Science, Technology & Society 22:1 (2017): 6–20
La provisión de viviendas asequibles es un problema importante en muchas ciudades europeas. ¿la crisis de la vivienda en Europa, es en definitiva una “crisis de la tierra”?
Sí, es eso, pero sólo si vemos la tierra como un activo, un activo material, de la misma manera que la casa puede transformarse (a través de la matemática algorítmica) en un activo….
Pero, recordemos, que los residentes de bajos ingresos, han sufrido durante mucho tiempo una crisis de vivienda. Lo que está despegando ahora es de otro tipo, como expliqué anteriormente… Nosotros, las clases medias, ahora también estamos amenazados, al menos, por los grandes aumentos de nuestros alquileres (sobre todo, lo que estamos viendo es la duplicación de los alquileres existentes). El mercado clave para los complejos de vivienda modestos son ahora las clases medias modestas: maestros, enfermeras, bomberos, contables modestos, etc.
Lecturas adicionales:Sassen, S. 2015. “Digitization And Work: Potentials and Challenges in Low-Wage Labor Markets”
Traducción: Teresa Abril
