El aislamiento de los hogares ahorra 1.140 euros al año de media en la factura energética
El Parlamento Europeo votará una resolución que podría favorecer la factura energética de los ciudadanos de la UE
Un nuevo estudio realizado con el apoyo de organizaciones como Positive Money Europe, REVO Prosperidad Sostenible, ASUFIN, Green Building Council España y ECODES ha puesto de manifiesto que las rehabilitaciones ‘en profundidad’ podrían ahorrar 1.140 euros al año de media en los hogares españoles y comunitarios en las facturas de energía, con una propuesta de subvenciones completas para las familias más vulnerables.
El informe reclama préstamos al 0% de interés respaldados por el Banco Central Europeo (BCE) y subvenciones gubernamentales por valor de 11.500 millones de euros al año en España para desbloquear la oleada de rehabilitaciones ecológicas.
El estudio, ubicado dentro de una campaña por el desbloqueo de los fondos para las reformas por el aislamiento térmico de los hogares reclama préstamos al 0 % de interés respaldados por el BCE y subvenciones gubernamentales por valor de 11.500 millones de euros al año en España para desbloquear la oleada de rehabilitaciones ecológicas.
Los 3.000 millones de euros asignados a la financiación de la UE para la recuperación de la pandemia solo alcanzarían para cubrir 78.000 rehabilitaciones «en profundidad» de viviendas, muy por debajo de las 300.000 rehabilitaciones energéticas necesarias cada año hasta 2050 para cumplir con los objetivos de cero emisiones netas de los edificios.
Los miembros del Parlamento Europeo votarán sobre esto en la revisión de la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios en las próximas semanas, y en un momento en el que Vladimir Putin está utilizando el suministro de combustible como arma de guerra, esta no es una cuestión menor.
Aunque con la «excepción ibérica», que establece un límite de 48,8 euros por megavatio del gas utilizado para generar electricidad, ganamos tiempo, esta medida concluye el 31 de mayo de 2023. No es una solución a largo plazo para las facturas elevadas de electricidad.
Sobre todo cuando se espera que España experimente aumentos de temperatura de hasta 2 grados a partir de 2040, por lo que la demanda de energía en términos de refrigeración podría aumentar hasta en un 50 % y para calefacción hasta en un 13,5%.
Actualmente, existen otros programas de gasto público e incentivos fiscales que tampoco están consiguiendo impulsar la demanda y lograr un impacto real en las tasas de rehabilitación de viviendas «en profundidad». Hoy, España cuenta con una de las tasas de rehabilitación de viviendas más bajas de toda Europa. Según un estudio comparativo de la rehabilitación en Europa, el 17 % de las viviendas sufren algún tipo de reforma cada año, pero solo el 0,3 % se someten a una reforma «en profundidad» que influya directamente en la eficiencia energética con un ahorro superior al 60%.
Asimismo, las tres cuartas partes (76,5 %) de las rehabilitaciones se traducen en un insuficiente ahorro de energía de menos del 3%.
Sin embargo, con la ayuda de los préstamos al 0% de interés respaldados por el BCE y las subvenciones del gobierno por valor de 11.500 millones de euros al año, se estima que España podría ahorrar el equivalente a todas las emisiones de carbono generadas por 62 ciudades como Barcelona durante los próximos 30 años y, al mismo tiempo, se traduciría en un ahorro de 1140 euros al año en la factura de la luz y gas, lo que ayudaría a las familias más vulnerables.
Un caso real
Pedro de Manuel vive en un piso de alquiler en Madrid que ha sido reformado recientemente. Se mudó en 2019, cuando las obras acababan de empezar y el hecho de que se estuviera rehabilitando fue uno de los motivos que le empujó a cambiarse a esa casa. Como fabricante de tejas solares era muy consciente de los beneficios que traerían esas modificaciones del edificio. Entre 2020 y 2021 se hicieron las reformas de las ventanas y la fachada. Esta última se hizo durante la borrasca Filomena.
“Gracias a esto, en este verano de persistentes olas de calor solo hemos puesto el aire dos días”. La App de su compañía eléctrica muestra el cambio: En febrero de 2021 pagó 78,76 euros. Tras la reforma, en febrero de 2022 pagó 46, 44 euros. En agosto del 2020 pagó 93,19 euros, en agosto del 2021 pagó 40,94 euros y en el 22, con la ola de calor, aún menos 38, 96 euros.
El caso de Pablo de Manuel es un ejemplo de cómo podrían beneficiar a las familias la reestructuración profunda de los edificios. Pero no todas se lo pueden permitir y menos las más desfavorecidas, cuyas casas son las que más necesitan de estas reformas.