El informe del IPCC alerta que el calentamiento global causado por la acción humana puede ser irreversible
La gravedad de la situación obliga a la reducción drástica de emisiones y no a incrementarlas como se pretende hacer en España al tomar la decisión de ampliar los aeropuertos de Barcelona y Madrid
Josep Cabayol y Ester González
La primera parte del sexto informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, IPCC, por sus siglas en inglés (grupo I, base de ciencia física), publicado el lunes, 09/08/21, sostiene que la temperatura media desde el periodo preindustrial (1850/1900) ha subido 1,1 °C (1,25 °C en 2020) debido al vertido de Gases de Efecto Invernadero (GEI) que han convertido la atmósfera en un vertedero. Y sostiene que la temperatura media subirá más de 1,5 °C en los próximos 20 años si no se hace nada para evitarlo (reducción radical de Gases de Efecto Invernadero). Lo más probable, sin embargo, es que el aumento de un grado y medio tenga lugar en un máximo de 20 años.
Cambio climático comprometido
Permitidme que antes de continuar le pregunte a Francisco Doblas, director del departamento de Ciencias de la Tierra del Barcelona Supercomputing Center, profesor ICREA y coordinador de este último informe IPCC, qué es el cambio climático comprometido: «Es aquella parte del cambio climático de origen antropogénico (causado por la actividad de los seres humanos) que tendrá lugar independientemente de cuáles sean las emisiones a partir de ahora mismo. Esto quiere decir, que, incluso si se dejaran de emitir GEI hoy (fuésemos de golpe a cero emisiones), durante los próximos 20 o 30 años el cambio climático continuaría. La razón es que el sistema climático todavía se está ajustando a las emisiones que se han arrojado en los últimos 170-180 años, cuando comenzó la producción industrial a gran escala en todo el planeta. Esto significa que la adaptación no es una elección. Que debemos adaptarnos a una serie de cambios que tendrán lugar cualquiera que sea el compromiso que se adopte en la reducción de GEI».
Futuro inmediato
Si tenemos en cuenta que el calentamiento global antropogénico no es inferior a 0,20 °C / decenio, y que en función del cambio climático comprometido el clima continuará ajustándose durante al menos 20 años, hagamos lo que hagamos hoy en día, en nuestra opinión, el incremento de 1’5 °C, que según los Acuerdos de París no debía rebasarse, ya es inevitable y se producirá no más allá de 2040.
Pero qué opina Francisco Doblas, como decíamos, coordinador del último informe IPCC: «Si tenemos en cuenta el cambio climático comprometido, y que a escala global se observa un calentamiento desde el periodo preindustrial de entre 1 y 1,15 °C, es muy probable que se llegue a un aumento de 1,5 °C en los próximos 20. No tenemos, sin embargo, certeza de cuándo ocurrirá, ni de si hay alguna trayectoria de reducción de GEI que permitiera limitar el aumento a 1,5 °C». Y apostilla: «evitar un calentamiento de más de 1,5 °C es posible, pero sólo si la reducción de GEI es superior a la que hemos alcanzado hasta ahora, y muy probablemente bastante mayor que la reducción que tuvo lugar en 2020 debido a la Covid-19.
No hay tiempo
Peor es el análisis que ha hecho Carbon Brief al situar, en el previsible escenario de emisiones, la superación del grado y medio entre 2030 y 2035, ya sea de forma definitiva o temporal. El reto entonces sería evitar los + 2 °C, el aumento de temperatura que según los Acuerdos de París nunca se debería exceder. Tampoco es muy optimista Carbon Brief al entender que si no hay una muy fuerte reducción de emisiones, antes de mediados de siglo se habrá llegado a + 2 °C.
En este escenario da miedo que, tal y como explicábamos en el artículo «La salud del planeta lanza nuevos grito de auxilio«, publicado en Catalunya Plural el 22 de enero de 2021, se cumpla lo que se apuntaba en el documento IPCC hecho público en Incheon, Corea del Sur, el 8 de octubre 10 de 2018: «Si la temperatura rebasa en 0,20°C los +1,5°C, si llega a ser 1,7°C más alta que la media de la era preindustrial, revertirla, supondría, con toda probabilidad, un esfuerzo de captura de carbono, económica y técnicamente, imposible de conseguir «. Esto significaría que el Tipping Point de la temperatura, la gota que colma el vaso, sucedería al sobrepasar los + 1,7°C. Entonces el aumento de la temperatura sería irreversible. Si como dice ‘Carboon Brief’ los + 2°C están comprometidos, más lo estaría el punto de no retorno situado en +1,7ºC. Aterrador!
En todo caso, la gravedad de la situación obliga a la reducción drástica de emisiones y a no incrementarlas como se pretende hacer en España (que no cumple con la reducción de CO₂ recomendada por la ONU) al tomar la decisión de ampliar los aeropuertos de Barcelona y Madrid.
Aeropuertos
Un reciente trabajo del economista Lluís Torrens, miembro de Revo Prosperidad Sostenible, cuantificaba las emisiones de los vuelos con destino u origen en el aeropuerto del Prat en el año 2019, en 8,433 millones de toneladas de CO₂ equivalente. Las de Barcelona ciudad, sin el aeropuerto, que está fuera del municipio, son de 3,413 millones de toneladas de CO₂-eq, menos de la mitad (en toda España fueron 314,5 millones de toneladas de CO₂-eq). Y se preguntaba Torrens cuáles serían las emisiones en un aeropuerto que de los 52 millones de pasajeros de 2019 se pasara a los 70 de un futuro ‘hub’ internacional como son los de Madrid o París. La respuesta no puede ser más alarmante: alrededor de 18 millones de toneladas de CO₂-eq, el doble que las actuales. A la vista de los datos, ¿qué sentido tiene ampliar los aeropuertos? Javier Martín Vide, catedrático de Geografía Física en la UB y coordinador del Grupo de Expertos del Cambio Climático en Cataluña, se mostraba contrario a la ampliación de El Prat en TV3: «lo que se impone es una reducción drástica de las emisiones de GEI, y teniendo en cuenta cómo evoluciona el clima del planeta, yo no sería partidario de ampliar el aeropuerto porque seguiríamos dando el mensaje de crecimiento. Y no, debemos actuar de forma contenida en todos los ámbitos de la economía, de la sociedad…
¿Hacia dónde se encamina Cataluña?
En el último decenio la temperatura ha subido 0,7 °C en Cataluña. Si el aumento fuera lineal, y dado que según el Servicio Meteorológico, ya ha aumentado 1,6 °C, significaría que en 20 años, en 2040, la temperatura sería 3 °C más alta que en el período preindustrial. Pero no es lineal, sino que más bien se acelera. En los próximos 30 años, dice Doblas-Reyes, habrá un rango de temperaturas medias que oscila entre los + 2 y los + 3,5 °C dependiendo del comportamiento de la variabilidad interna. Esto nos lleva a temperaturas de 50 °C en el interior de Cataluña en torno a mediados del siglo y no un día puntual. Un hecho fatal, nunca visto, y que afectará ineludiblemente la vida de las personas: ¿nos podemos adaptar a estas temperaturas?
Consecuencias inmediatas
Razona Doblas-Reyes: «Durante el verano tendremos temperaturas superiores a las actuales. Esto tiene un impacto sobre la humedad que conserva el suelo y que permite crecer a las plantas. Cuando aumentan las temperaturas, aunque las precipitaciones no disminuyeran (de hecho, serán inferiores), el hecho de que se evapore más agua del suelo implicará que haya menos agua disponible. Si esto ocurriera ya en primavera, el impacto sobre la agricultura y los ecosistemas sería terrorífico.
Los ecosistemas, la naturaleza, deberán adaptarse al nuevo régimen de temperatura y disponibilidad de agua, a un nuevo clima. Habrá que adaptarse a la nueva disponibilidad de agua también en cuanto a los cultivos, la industria, el turismo o la misma vida cotidiana… Hay que ir pensando, pues, en reducciones de los usos del agua porque continuar por el mismo camino devendrá insostenible «.
Responsabilidades
Nos preguntamos entonces por qué el Govern de Catalunya todavía se empeña en permitir la implementación de campos de energía renovable en un 10% de los terrenos de secano y un 5% de regadío en suelos de cada municipio, de nivel 3 y 4 y, por tanto, buenos para los cultivos. Según sus propios datos, nunca en los tiempos modernos se ha superado el 40% de soberanía alimentaria. ¿Qué pretenden, pues, continuar importando comida cargada con el CO₂ que conlleva el transporte? ¿Qué se produzca la comida en Centro Europa y dedicar Cataluña / España al monocultivo energético? ¿Obviar que el sistema agroalimentario, incluyendo el transporte y según hagamos las cuentas, supone entre el 21 y el 37% del total de las emisiones de GEI? ¿Renunciar, aunque formalmente se diga lo contrario, a aumentar la producción de alimentos de proximidad? ¿En ser aún más dependientes?
¿Y en qué piensan los gobiernos del Estado y de Cataluña cuando manifiestan la voluntad de ampliar los aeropuertos? ¿Se proponen superar los 2 °C, quieren hacer irreversible la temperatura, pretenden rebasar el Tipping Point? ¿No les basta que tanto en Cataluña como en España (el Mediterráneo es una región muy sensible y se calienta más que la media de la Tierra en especial en el verano y el otoño) la temperatura sea ya entre 1,6 y 1,7 °C más alta que en el periodo industrial?
Si lo hacen, si contribuyen al aumento de las temperaturas, ya no podrán alegar ignorancia y caerán en una irresponsabilidad, que me pregunto si no podría ser de carácter penal, dado que la vida de las personas está en grave peligro. Ya sea por las temperaturas altas permanentes, por las noches en las que no se podrá descansar, por la duración de las olas de calor, o por los incendios forestales. En definitiva, porque se perderán vidas prematuramente.
Esta semana viviremos una ola de calor probablemente sin precedentes. ¿A qué temperatura se llegará y por cuántos días? ¿Cuántos incendios forestales viviremos? ¿Qué consecuencias tendrá sobre los ecosistemas, los cultivos, sobre la salud de las personas y demás seres sensibles que habitamos la biosfera? ¡Habrá que permanecer atentos!
Los últimos estudios publicados en revistas cualificadas y revisados por pares, nos indican que el deshielo del Ártico, Groenlandia, la Antártida Occidental y el permafrost, han superado los Tipping Points, han traspasado los puntos de no retorno. El deshielo ya no se detendrá y eso hará que el nivel del mar no pare de crecer. ¿Cuánto y cuándo?