Ariadna Cotén y Jaume Osete, de Zeroport| Pol Ríos
La ampliación del aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat y el puerto de Barcelona son dos iniciativas que la plataforma Zeroport considera incompatibles con la crisis ecológica, la disponibilidad limitada de recursos energéticos y materiales y los compromisos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. La consejera de Territorio y portavoz del gobierno de la Generalitat, Silvia Paneque, afirmaba, en cambio, el pasado día 14 de febrero, que la ampliación del aeropuerto es «absolutamente necesaria». Escuchamos las razones de la oposición a la ampliación de estas infraestructuras de Ariadna Cotén y Jaume Osete, dos miembros de Zeroport, entidad que desde el 25 de enero participa en un nuevo espacio de movilización social, Revoltes de la Terra.
El aeropuerto batió el récord de pasajeros el pasado año: 55 millones. ¿Es un éxito o un fracaso?
A.C.- Esto es un desastre, porque este aeropuerto básicamente es un aeropuerto de llegada. Un 73% de los vuelos que llegan son low cost, vuelos turísticos, lo que significa que es un aeropuerto para turistas.
J.O.- AENA dice que el límite teórico de capacidad del aeropuerto son 55 millones de pasajeros y, claro, utilizan el dato del pasado año como argumento de la necesidad de ampliar. Pero si algo tiene un límite significa que no debes superarlo, no que debes ampliarlo.
Y cuando la consellera dice que la ampliación es absolutamente necesaria, ¿qué pensáis?
J.O.- Es necesaria desde una manera de ver las cosas y obviando otra serie de aspectos. En el tema de la ampliación del aeropuerto hay unos argumentos en contra que son independientes de cómo se quiera hacer la ampliación, como la crisis climática o que no deben llegar más turistas. Otros se refieren a cómo se quiere realizar la ampliación, que tiene que ver a cómo afecta a La Ricarda o con el ruido, dependiente de la configuración de pistas. Pero lo importante aquí es que no debe hacerse, independientemente de cómo quieran hacerla. ¿Por qué? Porque supone más emisiones de lo que nos podemos permitir y supone más turistas. No debemos discutir el cómo, sino el qué. Y el qué, es que no es necesario. No podemos permitírnosla. Es una barbaridad.

A.C.- Paneque es consejera de Territorio, Vivienda y Transición ecológica. Se supone que si sabe algo de medio ambiente debería ser la primera en plantearse si necesitamos más aviones. Ellos tienen un modelo económico de crecimiento, de basarse en la industria turística, de potenciar al sector terciario al máximo en Barcelona. Los titulares del día después de la noticia de que el aeropuerto había tenido 55 millones de pasajeros el año pasado eran que estaba colapsado y que era necesario ampliar. La misma nota de prensa de AENA, donde explicaba que se había llegado a los 55 millones de pasajeros, decía que si se quiere crecer, es necesario utilizar horas valle o desestacionalizar, lo que tiene trampa. Esto no significa que el aeropuerto esté colapsado siempre, las 24 horas, ni mucho menos. Hay muchos días que el aeropuerto no opera al máximo de su capacidad. De hecho, esto ocurre la mayoría de días. El máximo de capacidad se da varios días y en verano. El resto no está colapsado, pero interesa decir que lo está.
J.O.- El debate que estamos teniendo es el contrario del que deberíamos tener. El debate debería ser cómo reducimos los vuelos, cómo hacemos que la aviación decrezca. Porque es el medio de transporte más contaminante, el que más emisiones hace, es bastante elitista, porque aproximadamente un 80% de la población mundial no ha cogido un avión en su vida ni posiblemente lo coja nunca. Sin embargo, algunas personas son viajeros frecuentes y tienen una huella ecológica descomunal. No decimos que tengan que prohibirse los vuelos, ni eliminarlos, pero sí debemos reducirlos a una cantidad y capacidad más razonable. Ahora bien, tomar un avión para ir un fin de semana a hacer unas compras es algo que se hace y no tiene sentido, ni es lógico, ni sostenible, ni sano, ni incluso correcto para una forma de vida normal y corriente. Es necesario un cierto cambio cultural. Debemos replantearnos mucho nuestra forma de vivir, en especial las clases sociales más favorecidas. Tiene mucho que ver con el precio de los billetes. Está completamente subvencionado, porque cuando un mismo trayecto es mucho más barato en avión que en tren es que algo no funciona bien. El queroseno carece de impuestos y los vuelos internacionales no tienen IVA. Es una distorsión competitiva total. Difícilmente el tren podrá competir en la media distancia frente a un vuelo que tiene esta subvención de precio. Debería serr al revés, debería favorecerse el tren. Ahora estamos favoreciendo el medio de transporte más insostenible.
«La ampliación del aeropuerto supone más emisiones y más turistas y no nos lo podemos permitir»
A.C.- Después de la pandemia la gente tenía muchas ganas de viajar, todo el mundo quería salir, las compañías de low cost son cada vez más importantes, los vuelos son más baratos, y encima hay una parte muy importante del capitalismo inversor que ha visto en el tema del turismo un filón donde ganar mucho dinero y, por tanto, ha invertido mucho.
J.O.- Aparte, intentan hacernos ver que si amplían el aeropuerto no vendrán más turistas sino que vendrán personas que se dedican a los negocios, personas de no sé qué continente, a captar talento… ¡Ya me dirás tú cómo prohibirán que vengan más turistas, cómo harás para que no vengan más turistas si amplías la capacidad!
¿Tenéis un orden de prioridades? ¿Hay alguna cuestión que justifique más que otras que no debe ampliarse el aeropuerto?
A.C.- Todas son bastante importantes. Es importante preservar el delta, esto está clarísimo, los espacios naturales y los espacios agrarios y el acuífero están muy estropeados, pero también es importante pensar en el modelo económico que queremos como ciudad. Vamos abocados al desastre si nos dedicamos sólo al turismo. El turismo barato tiene los días contados. Están pensando en ampliar el aeropuerto y todo el mundo sabe que los combustibles futuros serán más caros. Las compañías aéreas ya lo saben. Se han realizado informes por parte de consultorías internacionales que calculan en qué porcentaje afectará a la caída de turistas. Es una irresponsabilidad plantear la ampliación del aeropuerto sin tener ya no una visión a largo plazo, sino a medio plazo. Todos los motivos son importantes. El tema de la contaminación es importantísimo. Gran parte de la contaminación del área metropolitana proviene del aeropuerto y yo creo que todos los temas son importantes. Ellos sólo tienen un motivo, que el aeropuerto genera puestos de trabajo, crecimiento y progreso. Es éste y no hay más. Nuestros motivos son muy variados y amplios y afectan mucho más a la vida de la gente.
J.O.- Teniendo en cuenta que su argumento es falso porque no es progreso, provoca la destrucción de nuestras condiciones de vida.
Una de las razones que defienden para aumentar el número de vuelos en el aeropuerto de Barcelona es que algunas conexiones internacionales deben irse a hacer ahora a Madrid
J.O.- Si eliminamos toda una serie de vuelos prescindibles de corta y media distancia y al final el aeropuerto se queda en 40 millones de pasajeros -me invento una cifra por decir algo, para mí deberían ser menos- podemos hablar de si es necesario o no. Pero es un argumento falso porque vienen a decir que habría determinados vuelos que se ahorrarían, como los de Barcelona-Madrid. Esto podría ser cierto si Madrid no ampliara también su capacidad, pero Madrid también tiene en marcha una ampliación. ¿Qué me estás diciendo? Este argumento no se toma por ninguna parte.
A.C.- Los vuelos intercontinentales son los que más contaminan. Quizás no contaminan todo en Barcelona, pero son los que más contaminan por pasajero y kilómetro. Esto es una auténtica barbaridad. Ya vienen vuelos intercontinentales. Hablan como si no llegaran vuelos intercontinentales pero llegan. Luego hay otro tema que nosotros también vemos, porque estamos estudiando puerto y aeropuerto, y es que existe un nexo muy claro entre vuelos intercontinentales y cruceros. Ellos intentan captar lo máximo posible de cruceristas y los países en los que hay más personas que viajan en crucero son Estados Unidos y Canadá y también han estado subiendo mucho los de Extremo Oriente. Lo que quieren es traer cruceristas. Y no lo esconden. Turismo de Barcelona llegó a decir que «necesitamos ampliar el aeropuerto porque necesitamos más cruceristas y más turismo de calidad». Collboni y los socialistas quieren menos cruceros de paso y más cruceros de puerto base porque, según ellos, éstos son los que dejan dinero. No, estos no son los que dejan dinero, estos son los que vienen en avión. Puerto base significa que comienzan y terminan la singladura en Barcelona y deben venir en avión. Según ellos, permanecen más días, pero al final acaban contaminando mucho más. Contaminan con el avión que vienen. Necesitamos más vuelos continentales para que vengan los cruceristas. Obligan a ampliar en el aeropuerto, y encima cogen cruceros que contaminan una barbaridad.

Dicen que los biocombustibles irán bien para ahorrar la contaminación de los aviones
J.O.- Ya no dicen ni eso. Ya reconocen la verdad, que sólo un 2% de los aviones los utilizan. Las previsiones de los próximos años, de la próxima década, son unos porcentajes mínimos, y de llegar a un 10%, a lo sumo. Y, aparte, no son sostenibles. Se debería analizar cómo se producen. Y también son mucho más caros. Obligatoriamente, por un factor precio y demanda, haría que determinados vuelos y determinado turismo no se pueda mantener. Terminará mal. Es tirar un dinero que ahora dicen que no sale del presupuesto público. De momento quizás no, aunque el 51% de AENA es del sector público, pero dentro de unos años igual debemos rescatarlo. Miremos muy bien esto. No miremos sólo las próximas elecciones o las cuentas de resultados de determinadas empresas, constructoras, bancos,… que son las que ganarían dinero y son las que están interesadas. Miremos a 5, 10, 20 años vista, para prever por dónde irá el tema y lo que debemos hacer y lo que no debemos hacer.
“Hay un claro nexo entre vuelos intercontinentales y cruceros. Quieren ampliar el aeropuerto para que vengan más cruceristas”
A.C.- Por eso nosotros decimos que tenemos que decrecer. Si hacen un estudio económico serio, no hace falta que sea desde el punto de vista activista, con una consultoría, les dirán: cuidado, porque en 10 años habrá menos vuelos, porque la gente volará menos. Para producir combustibles sostenibles se gasta mucha energía, pero parte de esa energía también son combustibles fósiles, con lo que acabamos igual. Recuerdo que cuando dijeron que el 10% debían ser combustibles sostenibles en 2030, creo, las compañías aéreas pusieron el grito en el cielo, diciendo que esto era muy caro y que el modelo no se aguantaba. Pues, si el modelo no se sostiene, ¿cuántas empresas se llevarán por delante porque tienen unos márgenes justísimos?
En octubre el gobierno de Salvador Illa creó una comisión técnica para que recomiende cómo hacer la ampliación. ¿Qué esperáis?
A.C.- Creemos que ya sabemos el resultado por lo que han ido diciendo. Querrán ampliar la pista por La Ricarda. Y lo que quieren, de cara a Europa, que tiene un procedimiento abierto de infracción por el deterioro del Delta, es justificar que se cargarán La Ricarda creando otro espacio húmedal en algún sitio. Lo último que sabemos es que para hacer estas compensaciones han contratado a una consultoría externa con prestigio internacional para que les haga un estudio al respecto, que les diga cómo deberían hacerlo para justificarse ante Europa.
J.O.-Por eso han puesto a Jordi Sargatal de secretario de Transición Ecológica, porque de muchas cosas no tiene ni idea pero tiene un cierto pasado ambientalista y piensan que esto puede ayudar a convencer a Europa en este sentido.
A.C.- Es un personaje curioso porque primero participó en el informe de impacto ambiental de la anterior ampliación del aeropuerto, un informe que decía que, tranquilos, que no pasaría nada, que la laguna de Cal Tet funcionaría, que Ricarda funcionaría con la ampliación. Mentira. Foment del Treball hace dos años creó una comisión con empresarios para estudiar todas las posibles opciones de la ampliación y la que veían más posible era alargar la pista poniendo unos pilotes en la Ricarda. Sargatal formaba parte de esta comisión, no como ornitólogo, sino como empresario turístico. No sabemos si frente a Europa les puede funcionar, pero frente al movimiento ecologista está totalmente desacreditado.
Paneque decía que el gobierno apuesta por hacer una ampliación lo menos agresiva posible con La Ricarda
J.O.- Argumentos hay muchos, pero algunos son independientes de cómo se haga la ampliación. De ellos son de los que ellos no quieren hablar, porque son los que la cuestionan de raíz. No es como la hacemos, es la no ampliación. No quieren hablar de crisis climática, no quieren hablar de turismo y vivienda, no quieren hablar de salud. Quieren hablar de La Ricarda sobre todo. Como si el problema ambiental fuera sólo Ricarda, que es un problema muy grave, pero no es el único problema. Piensan que tal vez esto tenga menos oposición social. Si miras la televisión cuando hablan, sólo lo hacen de La Ricarda, básicamente. ¿Por qué? Porque no quieren hablar de los otros temas. Y cuando se les pide por estos otros temas, sacan argumentos peregrinos que no se sostienen.
«Cuando un mismo trayecto es mucho más barato en avión que en tren es que algo no funciona bien»
Proponen que los efectos sobre la biodiversidad de La Ricarda se compensen con actuaciones en otras partes de la zona
A.C.- Esto ya se sabe que no funciona. En la anterior ampliación realizaron una laguna artificial en Cal Tet y nunca ha funcionado. Las aportaciones de agua son de baja calidad y el agua no se renueva, por lo que se eutrofiza. Un lago depende de los acuíferos, de las aportaciones y salidas de agua, de lo que tiene alrededor, si tiene pinares,… Si no, no funciona. Ricarda es lo mismo. Hicieron algo artificial y no funcionó. Los espacios naturales no pueden trasladarse. No puedes coger una laguna y ponerla en otra parte y pensar que va a funcionar igual que la otra.¿Y qué confianza podemos tener en lo que nos digan ahora al respecto, cuando en la primera ampliación no cumplieron nada y tienen un expediente abierto en Europa? ¿Qué confianza podemos tener en lo que digan ahora que van a hacer?
¿Europa no exige que se cumplan aquellos compromisos? ¿Qué ocurre con su expediente?
A.C.- Está abierto y están encima. Tener un expediente abierto por incumplimiento es un problema para ellos porque cualquier cosa que quieran hacer en el delta se lo denegarán. Y lo saben.
J.O.- Alguna de las compensaciones que quieren plantear también afectarían a terrenos agrícolas, al campesinado del delta, y tampoco nos lo podemos permitir. No podemos perder terrenos agrícolas de calidad. El espacio es limitado, es lo que es. El aeropuerto está donde está situado. Allí alrededor hay una serie de cosas. Y realizar estos movimientos cargándote un tesoro como el delta del Llobregat es la ruina. Esto no se puede defender en modo alguno.
¿Del Puerto que más le preocupa? ¿La ampliación o los cruceros?
A.C.- El puerto, cuyo problema es que es mucho más opaco y siempre se está ampliando. Así como en el aeropuerto tiene que hacer planes para la ampliación, el puerto siempre se está ampliando. Actualmente hay tres ampliaciones en marcha. Primero está la terminal Hutchinson, al final de todo el puerto, y es una terminal de contenedores de propiedad china que está permanentemente creciendo en la terminal Best y ahora la están también ampliando en el muelle que hay enfrente, en el Dic Sud. Después están los nuevos accesos ferroviarios y viarios del puerto, donde quieren cargarse todo el antiguo cauce y hacer una nueva autopista en el lado izquierdo del río y cinco terminales de tren. Todo esto en el antiguo cauce, justo donde debe ir una gran rotonda, está contaminado por cromitas. En la parte final del antiguo cauce, cerca del puente de Mercabarna, el terreno está contaminado por cromitas. Estaba la fábrica Bayer que fue vertiendo los residuos y ahora está contaminado por cromitas (cromo hexavalente), que es cancerígeno. Están enterrados pero también están a nivel del suelo. Es un problema muy grave porque el Port lo sabe y ha dejado que en el antiguo cauce se hagan huertos, haya viviendas o infraviviendas y la gente pase por allí. Lo hemos llevado a la Fiscalía de Medio Ambiente, conjuntamente con Depana, y lo están investigando los mossos. Está paralizado. Está cerrado. Hemos conseguido que, como mínimo, lo cerraran.
El Ayuntamiento anunció que cerrará dos terminales de cruceros
J.O.-Es que no es así. Son los anuncios, la propaganda y el marketing político. Ahora se empieza a ver cómo va el tema. En cierto modo podríamos decir que el Ayuntamiento simula que le pide al Puerto empezar a negociar para ver si se consiguen reducir las terminales. En el acuerdo que hizo PSC con Comuns dicen cerrar dos terminales, que son menos de las que proponemos nosotros. De ahí a lo que pase al final ya veremos, porque dentro del Puerto están el Estado, la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el de El Prat, también hay agentes económicos, algún sindicato y la patronal. Hay varios votos allí y hay que ver lo que sale. Por tanto, es una declaración supuesta de intenciones de querer cerrar alguna terminal, teniendo en cuenta que todavía no están en marcha todas las que están aprobadas o en construcción.
A.C.- Inauguraron la sexta, la de MSC, hace unos días.
J.O.- Si no se hiciera nada, en dos años, por ejemplo, habrá muchos más cruceristas de los que tenemos ahora mismo, que ya decimos que hay demasiados. Es obvio que es imprescindible cerrar terminales.
«Los biocombustibles no son sostenibles y son mucho más caros»
¿Cuántas terminales reclama Zeroport que se cierren?
A.C.- Nosotros proponemos tres, más una cuarta. Por cierto, aquí debemos reivindicar que la idea de cerrar terminales es de Stop Cruceros. Fuimos los primeros en enseñar un mapa diciendo que la A, la B y la C se pueden cerrar, porque son concesiones que acaban en un plazo de dos o tres años. Y después la G, que es la última de todas, la otorgaron hace seis meses y no han empezado aún las obras. Pero tres son fácilmente cerrables.
Hemos visto estos días informaciones sobre el avance en la electrificación de determinadas terminales
A.C.- Esto es el chocolate del loro, porque los cruceros, la mayoría, el 99%, no están electrificados. Estamos hablando de cruceros que a veces son como cuatro o cinco hoteles grandes. Unos cruceros de estas proporciones no pueden electrificarse.
J.O.- Tuvimos una entrevista con el presidente anterior del Puerto y ni él mismo lo veía claro. Decía que era una legislación que se había hecho en Europa, pero que ya veríamos cómo acababa porque las compañías no lo tenían claro
A.C.- Es mucho maquillaje de cara al exterior, pero el puerto funciona con combustibles fósiles al 99%. Funciona con barcos que utilizan un combustible que es el que más contamina, que no se puede utilizar en el suelo, es el peor que existe. Encima, gran parte de los cruceros también funcionan con este combustible. Aunque nos digan que funcionan con gas natural, la mayoría de los que vienen funcionan con el combustible antiguo.
J.O.- Nosotros consideramos que el turismo de cruceros es una actividad completamente superflua. Quizá sea el peor tipo de turismo que hay, porque es un desperdicio de recursos. Que una ciudad vaya por el mar… No hay necesidad de hacer esto. Es una actividad a extinguir directamente. Nosotros no decimos cerrarlo de golpe. Creemos que debe extinguirse como actividad a nivel mundial pero las cosas deben hacerse negociadas, de la forma más razonada, mirando sobre todo por la gente que trabaja, con los mínimos costes posibles, evidentemente, para el erario público, pero caminando en esta dirección. El turismo de crucero es una actividad completamente superflua y tóxica.
¿Qué le reclamáis, pues, al Puerto?
A.C.- Pedimos que cierren estas tres terminales, porque en dos años terminan las concesiones. Se podrían cerrar ya. Y que la última, la que acaban de otorgar, no la pongan en marcha, que deshagan la concesión, porque lo único que tienen es el suelo y no han construido la terminal. Con esto nos quedaríamos en tres terminales. Por mucho que empiecen ahora a hablar y a pactar, podemos encontrarnos este año o el que viene, que tenemos siete terminales en marcha y eso significa 4 millones de cruceristas. Lamentablemente estamos a 3,6 millones de cruceristas y si no se reduce ninguna, iremos a 5 millones de cruceristas.
Existe el riesgo de que, si no vienen aquí, los cruceros se vayan a Valencia o Palamós. Y la contaminación se desplace pero no se reduzca
A.C.- En Palamós y en Tarragona también están creciendo. Es una industria que está creciendo en todas partes.
J.O.- Pero plataformas en contra existen también en toda Europa. No queremos estas ampliaciones. El problema es reducir esta actividad a nivel global. La mejor forma de disminuir la contaminación, sea a nivel de la aviación, sea a nivel de cruceros, es reducir la capacidad de la infraestructura. Ésta es la mejor manera.
Conocemos las protestas por la contaminación o el exceso de cruceros pero no sabemos gran cosa de las obras de infraestructuras viarias que comportarían las ampliaciones del puerto
A.C.- Se habla muy poco. Políticamente, todas las administraciones están a favor del tema de las terminales. Lo venden como algo bueno y aseguran a su proyecto que servirá para sustituir camiones dentro del puerto por trenes, pero eso no es verdad, porque ellos mismos reconocen en su estudio que implicará a más camiones dentro del Área Metropolitana. Calcula que un 17% de camiones más. Cuando nos dicen que estas nuevas terminales ayudarán a que el puerto sea más sostenible porque habrá más trenes, es mentira. Aparte de la macroobra que representa, que supone construir una autopista y línea de ferrocarril nuevas junto al cauce del río Llobregat. Es una zona que debería estar protegida y en la que no debería poder construirse.
«En 10 años habrá menos vuelos, porque la gente volará menos»
J.O.- Es lo mismo que ocurre entre los combustibles fósiles y las renovables. Dicen que deben utilizarse más renovables, pero al mismo tiempo no están reduciendo los combustibles fósiles. Están sumando otros tipos de energía. Son los combustibles fósiles los que provocan la crisis climática. Y con las nuevas terminales ocurre un poco lo mismo. Haces no sé qué, pero no reduces la contaminación y las emisiones.

¿Contamina más el puerto o el aeropuerto?
A.C.- Las últimas informaciones dicen que claramente contamina más al aeropuerto.
¿Sumando puerto y aeropuerto cuánto contaminan?
A.C.- Mucho más que los coches, por ejemplo. Según sus estudios, puerto y aeropuerto suman el doble o cuatro veces más.
El 25 de enero se presentó la plataforma Revoltes de la Terra. ¿Puede ser una buena herramienta para luchar contra las ampliaciones del puerto y el aeropuerto?
J.O.- Todo lo que sea sumar energías, encontrar los puntos palanca que pueden servir para sumar a mucha gente, que vea que en un momento determinado hay que poner todas las energías en una batalla es importante. El ataque es muy bestia en todos los frentes y cada reivindicación tiene su lucha. Por eso es bueno encontrar espacios en los que podemos compartir y ver cómo durante unos meses dedicamos mucha energía a una lucha sin dejar la nuestra más concreta. Esto tiene fuerza para que al final sumes gente y resistencia y cuanta más gente haya apoyando una lucha es más fácil que la ganes. Es evidente y se ve constantemente. Es un paso interesante y por eso participamos.
A.C.- Participamos desde el principio y creemos que es ilusionante. Es algo nuevo, una nueva dinámica de lucha, una forma nueva de enfrentamiento. Todo el mundo está trabajando con su proyecto, con su lucha, haciendo pequeñas cosas, pero si nos unimos a todos en una lucha concreta puede llegar a ser más efectiva.
J.O.- Es como en septiembre de 2021, cuando organizamos la protesta en contra de la ampliación del aeropuerto. Esa fue una protesta totalmente transversal. Los movimientos vieron que era una lucha primordial, icónica, un emblema y que no se podía perder. Se tuvo muy claro y por eso fue un éxito y se descartó la ampliación. Esto puede ocurrir con otras luchas, que son igualmente muy relevantes, que tienen que ver también con el modelo económico, porque es un debate que no estamos teniendo. Estamos perdiendo el tiempo en los debates del siglo XX y no estamos teniendo los debates del siglo XXI. El debate del siglo XXI es cómo rehacemos el modelo económico para adaptarlo a las situaciones que tenemos y tendremos. ¿Eso qué implica? Que toda esa globalización económica tan profunda que tenemos difícilmente tendrá continuidad. Ya está empezando a pasar, la economía se está dividiendo en blogs, empieza a haber aranceles. Debemos ganar mucha más soberanía energética, económica, alimentaria. Y estamos perdiendo el tiempo porque no estamos trabajando en ello. Por eso decíamos también que los temas del campesinado, de los terrenos agrícolas, no los podemos dejar atrás. Porque, al final es pan para hoy y hambre para mañana. La clase política debería trabajar con este horizonte, no en el de las próximas elecciones sino cómo hacemos para que dentro de 10 años no dependamos tanto del turismo. Ahora el verano dura más tiempo, pero no vendrán tantos turistas porque tendremos temperaturas casi insoportables. En lugar de estar pensando en esto, están incidiendo en un modelo que nos lleva al desastre. Y los efectos ya empezamos a verlos de forma clarísima, brutal y descarnada, como acabamos de sufrir en Valencia.
«El puerto el problema que tiene es que es mucho más opaco y siempre se está ampliando»
A.C.- La clase política está haciendo como si se tapara los ojos o está haciendo el camino contrario. Ellos siguen con el modelo de desarrollismo del siglo XX y el tema ambiental es como un pequeño arrecife, que “ya lo arreglaremos, lo saltamos y seguimos, seguimos y seguimos”. Y lo hacen amparados por la patronal, que también sabrá que vamos directos al desastre, pero que quiere ganar hasta el último euro.
J.O.- Y las élites económicas están encantadas con el Partido Socialista de Catalunya. Nosotros le llamamos el Partido Suicida Climático.
Zeroport se opone también a las ampliaciones del puerto y el aeropuerto porque aumentan la desigualdad social. ¿Me lo razonáis?
J.O.- Tiene que ver también, por ejemplo, con el tema de la vivienda, que es una lucha clave en este momento. Seguramente es la demanda más transversal y más profunda que existe ahora mismo en cuanto a reclamación a la clase política: hay que solucionar el problema de la vivienda. ¡Ya me dirás cómo arreglarás el problema de la vivienda si cada vez hay más turistas que quieren venir a pisos turísticos que triplican los alquileres! La gente que está pagando un alquiler y cuando le suben no puede pagarlo tiene que irse de la ciudad y entonces aparecen pisos turísticos. Además, hay gente de otros países que viene y trabaja para su empresa desde aquí, haciendo que suban los precios también, porque tiene un mayor poder adquisitivo.
A.C.- Se está potenciando el modelo económico basado en el turismo y está demostrado que todos los puestos de trabajo que se crean en torno a la industria turística tienen unos sueldos mucho más bajos, trabajos mucho más precarios que los de la media de la ciudad. Incidimos en mayor precarización. Tenemos el problema de vivienda, mayor precarización y sueldos más bajos. Pero es que no está sólo en la ciudad. El sector de la aviación en todos estos años ha cambiado mucho y también genera sueldos precarios. Hace 30 o 40 años trabajar por una compañera aérea era ganar mucho dinero. Trabajar para AENA era ganar dinero. Ahora ya no. Ahora lo tiene todo subcontratado. Por eso hacen huelgas constantemente, los trabajadores de los handlings, los de las maletas… Son puestos de trabajo muy precarios. Cada vez más. Es una industria que va creciendo pero los puestos de trabajo que crea no crecen igual que la industria.

JO- La dependencia económica del sector del turismo es muy elevada. Es un 13% o 14% del producto interior bruto. Esta dependencia tan grande se vio como la pandemia. España se hundió. Episodios de este tipo, sean pandemias, crisis a nivel climático, eventos extremos, la subida del precio de los billetes, todo ello hará que difícilmente este turismo tan elevado pueda mantenerse. Incluso la patronal del turismo dice haber llegado al límite. Si la patronal del turismo dice que se ha llegado al límite, ¿por qué se plantea ampliar los aeropuertos?
AC- Para ampliar el sistema, porque AENA es consciente de que los aeropuertos que generan más dinero son los aeropuertos turísticos. Una parte importante de sus ingresos le vienen de las tasas aéreas pero la mayor parte de los beneficios le vienen por el alquiler de espacios, tiendas y eso liga con el negocio turístico. Quieren invertir miles de millones en ampliar un aeropuerto y el otro día salió una noticia que decía que muchos ciudadanos españoles no pueden ir de vacaciones, no sólo no pueden coger aviones sino simplemente ir de vacaciones, y que sólo un 30% coge un avión una vez al año. ¿Estamos ampliando una infraestructura para que la utilice quien? ¿Quién es el porcentaje de la sociedad?
JO- España ha invertido una millonada en AVEs, hemos destruido los trenes nocturnos y tenemos las cercanías como las tenemos. Donde se deberían poner el dinero ahora sobre todo es en las cercanías, que utiliza la mayoría de la población para ir a trabajar o para actividades cotidianas y en los trenes nocturnos que nos podrían evitar muchos trayectos de media distancia en avión. Es posible ir perfectamente a París en un tren nocturno y eso se lo cargaron. Ahora el resto de Europa lo está recuperando. Se tiene que poner dinero para recuperar un servicio que teníamos y potenciarlo.
AC- Y aquí van en sentido contrario, ampliando el aeropuerto y queriendo más turistas.
¿Con la mano en el corazón, cree que harán la ampliación?
AC- Todo el mundo piensa que es para ya, pero es a largo plazo. Ahora esta comisión dirá cómo quiere ampliar. Dirán que se cargará La Ricarda pero que lo compensarán de alguna manera. Nosotros saldremos a la calle. Durante 2025, la propuesta que hará la Generalitat la estudiará AENA y hará su plan DORA (Documento de Regulación Aeroportuaria). La otra vez empezó en 2021 y ahora será el DORA 2027-2033. Este DORA es como el plan de inversiones. Si todo va como ellos quieren, llevarán la ampliación del aeropuerto a un Consejo de Ministros del año 2026. Los términos son lentos. Creemos que ahora es un punto importante, cuando Illa y la Generalitat digan que quieren ampliar, pero en 2025 irán pasando cosas y en 2026 tendrá que pasar por el Consejo de Ministros. ¿Quién habrá en el gobierno de Madrid que apruebe esto? Tampoco lo sabemos. Incluso cuando se apruebe este documento no significa que al día siguiente se empiece a mover la tierra. Estaremos ahí. No dejaremos que lo hagan.
«Si no se cierran terminales, dentro de dos años habrá muchos más cruceristas de los que tenemos ahora, que ya hay demasiados»
JO- Hay diferentes opiniones personales. Mi opinión, es la misma que tenía en 2021, es que no se hará. ¿Por qué? Porque como dice ella, el plazo es largo. Las obras tal vez empezarían en el 2027 o más allá. Parece que no falta demasiado, pero faltan varios años. Se irán viendo una serie de eventos, en el tema de combustibles, en situaciones extremas climáticas,… y si logramos situar el debate donde debe situarse, un debate ampliado donde se hable de todo y no sólo de lo que ellos quieren hablar, la ampliación no se hará. La oposición social que habrá, si esto sigue adelante, será fuerte y contundente.
AC- Tenemos la sensación de que hay muchas ganas de lucha. Para la gente es una línea roja. Dice que esto ya se paró en el 2021 y pregunta por qué vuelven a insistir ahora. Yo también creo que no se hará la ampliación. Desgraciadamente todo comienzará a deteriorarse relativamente rápido y se verá que es una barbaridad absoluta.
¿A qué atribuye la insistencia en la ampliación del aeropuerto y el puerto a pesar de los argumentos en contra que planteáis?
JO- El sistema está roto. Tenemos un sistema político que está cooptado, segregado por el poder económico. La mayoría de las empresas cotizan en Bolsa y el sistema les exige que cada año tengan mayores beneficios. El sueldo de los directivos de las compañías depende de que cada vez den más beneficios y más dinero a los accionistas. Éstos, que tienen el poder económico, le piden al poder político -y por lo general lo consiguen, porque la mayoría de la clase política se deja comprar- que, en vez de potenciar el bien público, favorezcan los intereses privados a corto plazo. Aquí está el problema.
AC- Además pensamos que la ampliación anterior fue la obra pública más grande de España durante mucho tiempo. Y no estamos hablando sólo de las constructoras, sino de los bancos, las ingenierías,… Es dinero que se va directo a su cuenta de resultados.
“El turismo de crecimiento es una actividad completa superflua y tóxica”
JO- Y esto tiene relación con el auge de noticias falsas, la desinformación, porque quieren que la gente no sepa qué pensar. En un diario de los mayoritarios, lees la editorial y las noticias de la crisis climática y ves que no encajan. Las noticias alertan de la crisis climática pero el editorial dice que se tiene que ampliar el aeropuerto. ¿Por qué no cuadra? Porque hay unos intereses que hace que los medios de comunicación, que también están comprados por el poder económico porque es su propietario o el que pone anuncios, no digan las cosas tal y como son. Cuando la realidad objetiva es obvia y nos dice que no debemos ir por ese camino.
AC- Y terminan convenciendo a la opinión pública. Es como un goteo. Una vez que ya no se hacia la ampliación del aeropuerto pararon, pero hace ya un año y medio que han vuelto con el goteo. Y desde que el presidente Illa dijo que sería uno de los proyectos de su legislatura, han vuelto con mayor fuerza. Hay determinados diarios que cada semana sacan una noticia alarmista, que si el aeropuerto está colapsado, que parece que no puedas entrar físicamente… Hacen este tipo de noticias para convencer a la gente.