✈️ La ampliación del Prat: ¿progreso o retroceso climático?
El Gobierno de Illa está decidido a emprender una de las iniciativas más divisivas de la sociedad catalana: la ampliación del aeropuerto del Prat. La élite del tejido empresarial aplaude la medida porque significa más negocio, mientras que los barceloneses que se quejan de demasiado turismo saben que la ampliación va a empeorar la masificación. Los ciudadanos del Prat protestan por la degradación de los espacios protegidos del delta del Llobregat, y todos los que estamos preocupados por las consecuencias del cambio climático ponemos el grito en el cielo por el aumento de emisiones que va a suponer la ampliación.
❓ ¿Por qué siempre ocurre que los argumentos empresariales pasan por delante del bienestar ciudadano, la mitigación climática o la restauración ambiental?
❓ ¿Qué argumentos son más importantes para los ciudadanos de hoy y del mañana?
📉 Presupuesto de carbono: el nuevo marco ineludible
Desde hace algunos meses, los catalanes conocemos nuestro presupuesto de carbono, que nos señala el máximo límite de emisiones que Cataluña puede generar hasta 2050 y más allá para no superar el grado y medio de temperatura. El Comité de Expertos del Cambio Climático que lo calculó, lo ha presentado al Gobierno para que lo lleve a aprobación del Parlamento de Cataluña, tal como dicta la Ley de Cambio Climático.
Muchos esperamos que este trámite ocurra pronto, para que, a partir de ahora, cualquier política pública lo integre.
🧭 De la ignorancia al deber: responsabilidad compartida
Ahora podemos afirmar que ya no podemos escudarnos en la falta de conocimiento que nos pueda dispensar tomar medidas de mitigación coherentes con nuestra responsabilidad en el calentamiento global.
Esta responsabilidad recae también en el Gobierno sobre cualquier acción o decisión que tome a partir de ahora. El presupuesto de carbono debería incidir en todos los planes, programas y proyectos cuya aplicación pueda suponer un aumento o una reducción de emisiones.
Con este prisma deberían revisarse los planes existentes como:
- los planes generales de movilidad
- el plan de transición energética (PROENCAT)
- el Plan Integral de Energía y Clima sobre mitigación de emisiones (PINECCAT)
Todos ellos, hoy por hoy, prevén reducciones de emisiones que no están alineadas con el presupuesto de carbono.
📊 PINECCAT vs. realidad climática
El PINECCAT, que planifica las medidas de mitigación de Cataluña, prevé para 2030 una reducción de emisiones del 29 % respecto a 1990. Muchos se preguntarán el porqué de esta cifra tan baja, si el compromiso de la UE bajo el paquete Fit for 55 exige una reducción del 55 % para 2030.
Hay varias explicaciones para esta divergencia; una muy importante es que en 1990 Cataluña y España tenían una tasa de emisión de gases de efecto invernadero (GEI) muy baja respecto a otros países históricamente más emisores y, por tanto, una reducción del 55% supondría para nuestro país un esfuerzo comparativo mucho mayor respecto al de estos países.
Pero hay otros argumentos que no son tan convincentes, como el grado de desarrollo y la riqueza del país. La UE tiene en cuenta el PIB a la hora de negociar el esfuerzo de mitigación relativo de cada país. No podemos decir que Cataluña y España sean ya países poco desarrollados y mucho menos que la economía les vaya mal. ¿Cuántas veces hemos oído que somos uno de los países de la UE que más crece?
👉 Por tanto, estamos en un buen momento para aumentar nuestro grado de ambición. No solo eso. Nuestro país tiene una riqueza en el recurso energético renovable mucho más alta que otros países de la UE. La latitud nos favorece, y este factor también debe contar a la hora de determinar nuestra ambición en la mitigación.
🚨 Cataluña: lejos del ritmo necesario
El presupuesto de carbono de Cataluña indica que en 2030, la reducción de GEI debería ser de un 46 %, frente al 29 % al que el Gobierno catalán se compromete. La diferencia no es menor.
📉 Hoy mismo, Cataluña no está preparada para soportar reducciones anuales de un 8 % durante una década para poder cumplir con nuestro presupuesto de carbono. No está preparada porque ningún gobierno ha puesto los cimientos que permitan construir el camino de mitigación que debemos recorrer en tan poco tiempo.
No tendría ningún sentido achacar al gobierno actual las deficiencias debidas a los gobiernos anteriores. Pero dicho eso, también decimos con cifras en la mano, que el gobierno actual no puede seguir haciendo lo mismo que hicieron esos gobiernos. En la práctica, ese cambio de ruta que necesitamos urgentemente, pasa por emprender nuevas medidas de mitigación mucho más radicales que las que tradicionalmente se han tomado. Sobre todo, en los sectores más emisores y que menos han reducido sus emisiones.
🚗 Movilidad: el talón de Aquiles
De todos los sectores, la movilidad es el que necesita cambios más sustanciales.
El Gobierno de Illa traslada el mayor esfuerzo en la reducción de emisiones a la movilidad individual, dando por hecho que la electrificación de los turismos va a conseguir reducciones del 1 % al 20 % en este próximo quinquenio (¿creíble?). Pero, en contraste a esta ambición que se asigna a la responsabilidad ciudadana, los compromisos del gobierno en la reducción de emisiones son realmente muy continuistas de las políticas de gobiernos anteriores:
❌ No se ha visto ninguna intención de aumentar la electrificación del transporte público a excepción de Barcelona
❌ Ha rechazado todas las propuestas ciudadanas de ampliación de tren-tram sin excepción
❌ No hay sobre la mesa ningún plan de ampliación de nuevas líneas ferroviarias para llevar el tren a zonas turísticas que cada año quedan colapsadas por el tránsito
❌ Tampoco se oye que el gobierno tenga ninguna intención de instaurar peajes en algún tramo de autopista que, por su grado de congestión, se ha vuelto realmente peligrosa (Véase, por ej. la B30 o la A7).
✈️ Ampliación del Prat: una amenaza mayúscula
Pero lo que más duele es ver que, además de la falta de planificación a medio/largo plazo para cambiar el modelo hacia una movilidad descarbonizada, se toman medidas polémicas y muy protestadas que, en vez de disminuir, van a aumentar las emisiones de los GEI.
📈 El aumento de vuelos previstos con la ampliación del aeropuerto del Prat, puede multiplicar por 5 las emisiones de la ciudad de Barcelona.
❓ ¿Dónde están calculadas las previsiones de mitigación que necesitamos urgentemente?
🌳 ¿En qué bosques vamos a colocar las compensaciones de todas estas emisiones de más?
🤔 ¿Cómo vamos a cumplir con nuestros compromisos para con los ciudadanos de hoy, y sobre todo, para con nuestra descendencia?
👶 Escuchen la voz del futuro
Gobierno de Cataluña, si no escuchan a los ciudadanos de hoy, escuchen la voz de sus nietos.
Y estén preparados para responder con credibilidad cuando les pregunten:
💬 “¿Qué hicieron ustedes para garantizar un clima habitable y unas condiciones de vida dignas para las generaciones futuras?”

